Picotear, esa actividad que a veces hacemos de manera inconsciente y a la cual le tememos. Si hiciéramos el ejercicio de anotar cada cosa que comemos, notaríamos que no son sólo las cuatro comidas. Un pedacito de esta fruta, un cachito de aquella medialuna, y así durante todo el día. ¿Cómo podemos hacer para evitarlos?
Hay muchos que se obligan a hacer sólo las cuatro comidas diarias, sin embargo eso les genera más ansiedad por lo que, a la hora de hacerlas, comen más de lo debido. Ahí es cuando llega la colación. El secreto es saber elegir los snacks, ya que no es lo mismo comer un alfajor de chocolate que hacerlo con una fruta o un yogurt. Siempre, lo importante es la planificación.
Siempre hay que elegir alimentos que nos gusten, que calmen nuestro hambre y satisfagan nuestra necesidad de cuota de placer. Según detalló el Dr. Cormillot, podemos optar por:
* Cereales integrales. Son ricos en hidratos de carbono complejos y fibra, que proveen energía inmediata y perdurable. Considere las galletitas y las tostadas de salvado con bajo contenido de grasas.
* Frutas y verduras. Tienen valor de saciedad sin aportar grasas e incorporando sólo unas pocas calorías. También brindan vitaminas, minerales, fibra, antioxidantes y fitoquímicos.
* Frutas secas. Las almendras, avellanas, nueces y otras frutas secas son buenas para ayudar a mantener por más tiempo la sensación de saciedad. Su grasa es insaturada, es decir, saludable. Como aportan muchas calorías, deben consumirse con moderación (una cucharada sopera es la porción sugerida).
* Lácteos descremados. Queso, yogur y demás productos lácteos son una buena fuente de calcio, proteínas y otros nutrientes. Para evitar altas cantidades de grasa, elija los descremados. El yogur light asegura evitar el azúcar agregada.