Angelito se presenta como pizzería pero es mucho más que eso. Tiene minutas, carnes, pastas, tartas y empanadas a precios amigables en porciones abundantes; no falla.
La pizzería Angelito es uno de los locales gastronómicos más representativos del barrio de Villa Crespo. Con un cartel de neón azul y amarillo, en alusión a los colores del club local Atlanta, el lugar abre sus puertas desde las 6 de la mañana y permanece abierto hasta las 2 de la madrugada todos los días.
Aunque su nombre ostenta el título de «pizzería», Angelito no se limita a eso. De hecho, gran parte de su éxito se lo debe a sus minutas, especialmente a las enormes milanesas, que cuando salen napolitanas, desbordan de muzza y jamón. También tienen mucha fama sus cortes de carne preparadas de distintas formas: en estofado, al horno, en escalopes, etc.
Es cierto que muchos lugares suman puntos por su decoración, pero Angelito tiene una impronta tan «de barrio» que su ambiente despojado de elegancia y adornado con camisetas de fútbol y recortes de diario, le otorgan el título de bodegón a pesar de no contar con una trayectoria centenaria.
Pero según cuenta la historia, antaño existió en la esquina de Scalabrini Ortiz y Corrientes el emblemático «Imperio de Canning» (actualmente hay una pizzería llamada «Imperio» pero no es la misma). Con el cierre de el «Imperio», los maestros pizzeros que trabajaban allí (reconocidos por sus fugazettas rellenas y un eximio dominio del cuchillo) decidieron abrirse paso a su propia aventura y así nació Angelito.
Como buen bodegón, además de los platos de la carta, siempre hay un pizarrón en la puerta con las sugerencias del día. Algunos de los platos más destacados son las costillitas de cerdo a la riojana; los tallarines con estofado; la carne al horno; el filet con puré; matambrito al verdeo; los sandwiches de milanesa y hasta las tartas y empanadas. Ni hablar de las pizzas, hechas al molde, y generosas en sus agregados.
Vale decir, que Angelito es un lugar muy querido por todos los vecinos, pero además, se ganó ese respeto a fuerza de porciones abundantes a precios amigables. Un lugar que frecuentan los jubilados durante el día y por las noches toman grupos de amigos jóvenes para compartir. Apto para todo público y bolsillo para salir diciendo con una sonrisa en los labios: «Panza llena, corazón contento».
Angelito
Camargo 490, esq. Scalabrini Ortiz
Tel: 4855-9667