Unilever Food Solutions presentó una nueva edición de Menús del Futuro. El informe global dónde participan más de 1600 chefs de 21 países y que revela lo que se viene en la gastronomía global.

En un mundo en constante evolución y con mayor conocimiento del bienestar se evidencia un cambio significativo en los hábitos de alimentación. Es por eso que Unilever Food Solutions prepara año a año su informe Menús del Futuro, un estudio  exhaustivo, basado en datos de más de 21 países, que destaca cómo serán las cartas de restaurantes, bares y caterings, a lo largo de este 2024. 

El nuevo reporte enseña soluciones a algunos de los mayores desafíos que enfrenta hoy la industria. Desde cambiar el comportamiento ante la comida, la suba de los costos de producción hasta el impacto ambiental de la cadena de suministros mundial: que rinda más usando menos, el gran desafío que tienen los chefs hoy en día ante comensales cada vez más exigentes.

«Durante los últimos años las personas son más conscientes y están más atentas en la elección de los alimentos, lo cual está estrechamente vinculado a cómo nos relacionamos con el medio ambiente y a la apreciación de la calidad de nuestros ingredientes primarios. Estos dos hallazgos, sumado a la melancolía inherente de los argentinos y el deseo de experimentar la comida como un retorno a los sabores de la infancia, identifican a la Comida casera modernizada, la promoción de una Comida que hace sentirse bien y el Shock de Sabores como las tendencias más relevantes del 2024”, explicó Ramiro Hosselet, Gerente de Marketing de Cono Sur de Unilever Food Solutions.

Menús del Futuro: las 8 tendencias gastronómicas del 2024

Shock de sabores: 

Se trata de tener una respetuosa irreverencia por los sabores familiares, rompiendo un poco las reglas y brindando a los comensales el entusiasmo por explorar experiencias nuevas. Ellos quieren una fusión salvaje, un caos en la cocina y un enfoque sin limitaciones a los platos que ven en el menú. Se busca desafiar a las comidas con platos sensoriales que están pensados para deleitar.  

Proteínas Potenciadas por las Plantas:

La evolución culinaria abraza una nueva tendencia que impulsa la demanda de platos sabrosos y saludables mediante proteínas alternativas. Esta ola de flexitarianismo no solo ofrece una oportunidad gastronómica, sino también beneficios económicos y ambientales

Abundancia Local:

Celebrar lo producido localmente para mantenerse cerca de la naturaleza. Casi tres cuartos (77%) de los comensales pertenecientes a la GenZ y 70% de los Baby Boomers están dispuestos a pagar más por platos que incluyan ingredientes de fuentes locales. Agricultores y productores locales son los nuevos protagonistas.

Menús sin desperdicio:

Maximizar los recursos a través de la creatividad. Según investigaciones realizadas, la creciente rentabilidad de este enfoque es la principal razón por la cual los chefs adoptan esta tendencia, mientras que el 54% lo hacen porque es más sustentable. El hecho de que los costos de producción estén en aumento significa que necesitamos ser habilidosos para poder reducir el desperdicio. Reducir el desperdicio ya no solo se refiere a la sustentabilidad, sino también a maximizar el potencial de los ingredientes. 

Vegetales Irresistibles:

Casi la mitad de todos los chefs consideran esta tendencia como una forma de ofrecer nuevos platos más interesantes. Los comensales esperan que la comida no solo esté llena de nutrientes sino que debe ser bella, y en los vegetales puede estar esa belleza.  También es una manera más sabrosa de atraer nuevos comensales y destacarse de la competencia. Los vegetales han sido por mucho tiempo ignorados, es hora de que los pongamos en el centro de la escena.

Comida casera modernizada:

Se sigue apostando por los clásicos pero con un giro moderno para brindar platos aún más auténticos. Los comensales se encuentran ante nuevas e innovadoras experiencias alimenticias que saben y se sienten especiales. Pensemos en las recetas clásicas y ancestrales pensadas para ser compartidas y disfrutadas como comida reconfortante.

Comida que hace sentirse bien:

Explorar nuevas cocinas para satisfacer el apetito de la comida sana. Éste año el factor clave es el bienestar. Las opciones saludables están por verse transformadas. Animándonos a pensar por fuera de lo convencional, podemos soñar con platos divinos e inesperados que son ricos en nutrientes, hermosos a la vista, ¡y sabrosos al paladar!

Una nueva manera de compartir:

Se trata de atraer a más personas a conectar y unirse a través de la comida que hace bien al alma. Estamos inmersos en un tiempo de creciente conectividad, esto significa que las experiencias lúdicas y multi-sensoriales con la comida son más celebradas.