Algunos legisladores de la Ciudad de Buenos Aires por el PRO, presentaron un proyecto de ley en la Legislatura porteña para que se instalen alcoholímetros en boliches y bares en el ámbito de la Ciudad de Buenos Aires.

La idea es que quienes asisten a los locales y luego planean conducir, puedan utilizarlos en forma gratuita y voluntaria, para comprobar si realmente están aptos para conducir.

“Todo local gastronómico que expenda bebidas alcohólicas debe poseer uno o más alcoholímetros”, afirma el proyecto. El mimo explica que “los titulares de los lugares donde se reúnan personas que consuman bebidas alcohólicas serán responsables de proveer los alcoholímetros que requiera la reglamentación”.

Luego de la presentación, el diputado Roberto Quattromano argumentó que “es una iniciativa para ayudar a generar conciencia y contribuir a la seguridad vial. El comerciante debe tener en cuenta que se trataría de un servicio al cliente como medida preventiva”.

En la misma línea, Del Sol le dijo a La Nación que “el valor del aparato no puede ser motivo para rechazar el proyecto porque está en juego la seguridad de los vecinos”. El consumo indebido de alcohol es una de las principales causas de los accidentes de tránsito en la Ciudad de Buenos Aires.

Sólo en los primeros seis meses de este 2016, la Fiscalía de la Ciudad registró un total de 1955 multas de tránsito efectuadas a conductores que manejaban con un nivel de alcohol en sangre superior al permitido.