On my plate («En mi plato») involucra a 3.000 jóvenes activistas a través de un viaje de seis semanas para descubrir el mundo de la alimentación y las acciones que podemos llevar a cabo para mejorar nuestra relación con el planeta.

A partir del 18 de enero de 2021, Slow Food está guiando a 3.000 jóvenes activistas de todo el mundo en un viaje de seis semanas llamado «On My Plate», en el que se explorará el mundo oculto por el que viaja nuestra comida hasta que llega a nuestros platos y en el que se ofrecerán acciones para que todos podamos mejorar nuestra relación con nuestra comida, nuestro planeta y nuestro futuro. Junto con todos ellos, Slow Food promoverá la comida buena, limpia y justa para todos. Durante el proceso, será posible aprender a mejorar hábitos alimentarios y tener un impacto positivo y duradero en el mundo.

Jorrit Kiewik, el director de la Red mundial de Jóvenes de Slow Food (SFYN, por sus siglas en inglés), afirmó: «2020 ha sido un año extraordinariamente difícil. La pandemia mundial que ha fracturado el tejido social nos ha obligado a estar en casa, a pegarnos a las pantallas más que antes, mientras que el control de las corporaciones multinacionales sobre los sistemas alimentarios mundiales se endurecía, pues los pequeños artesanos de alimentos se veían obligados a cerrar. La importancia de las redes locales para nuestra seguridad alimentaria nunca ha estado más clara: los productores alimentarios independientes y los agricultores han redoblado esfuerzos para llenar el vacío que han dejado las cadenas de suministro alimentarias mundiales —frágiles, pero aún dominantes— y han adaptado sus modelos operativos para ayudar a contener la pandemia y alimentar a las comunidades locales. El reto “On my plate” se centra en crear un sistema alimentario que sea bueno, limpio y justo para todos».

Actualmente miles de participantes de 120 países de todo el mundo se han unido al reto.

Slow Food proporcionará a los participantes que se registren en onmyplate.slowfood.com una amplia gama de podcasts, vídeos y artículos sobre estos temas, cuestionando a la gente para que esta reflexione sobre sus hábitos alimentarios y sobre las personas que les llevan la comida de la granja a la mesa. De este modo, aprenderán más mientras se divierten y comparten sus descubrimientos con su red.

Para que «On My Plate» sea un éxito, Slow Food hace un llamamiento a los embajadores para que se unan como una comunidad de líderes y guíen este esfuerzo, creando el mayor impacto posible. Hasta el momento, más de 130 embajadores se unieron a la campaña en Instagram, entre ellos el agricultor Carlo Sumaoang, de Filipinas, la activista de la comida justa Diletta Belotti, de Italia, y María Alicia Ramírez, de Colombia.

Para más detalles, visita la página oficial: onmyplate.slowfood.com