El gran galardón de la alta cocina tuvo una nueva entrega y esta vez, un restaurante fueguino se consagró como ganador. Kalma Restó de Ushuaia fue el ganador del Prix de Barón B y además del trofeo, recibirá dinero y un viaje a Francia para perfeccionar su cocina.
El codiciado premio de Baron B que es un hito en el calendario gastronómico local, quedó en manos del cocinero Jorge Monopoli, dueño de Kalma Restó en Ushuaia, Tierra del Fuego. El cocinero ahora viajará a Francia para realizar una pasantía en Mirazur, el multipremiado restaurante de Mauro Colagreco. Además, el chef y su equipo obtendrán un premio económico de $500.000.
Monopoli fue elegido ganador del certamen tras varias instancias. El jurado a cargo de la decisión fue el chef Mauro Colagreco, la reconocida chef colombiana Leonor Espinosa; la sommelier argentina Paz Levinson; y Martín Molteni, cocinero argentino.
Kalma Restó es un pequeño y exclusivo restaurante que basa su gastronomía en el aprovechamiento del producto local que ofrece Ushuaia, en la provincia de Tierra del Fuego, durante las diferentes estaciones del año. El plato que eligió para representar su proyecto fue centolla del Fuego, gazpacho de zanahorias, ajo negro, kale y cassis maridado con Barón B Extra Brut. Su creación lo llevó a hacerse del primer premio.
Los otros dos proyectos que llegaron a la final del «Prix Baron B – Édition Cuisine», entre más de 65 postulantes, fueron El Baqueano – Cocina Autóctona Contemporánea de Fernando Rivarola, en Salta, y El Alambique de la chef Alejandra Repetto, ubicado en El Calafate.
Para concursar, El Baqueano presentó un plato de carne cruda de llama marinada, quinoa pop de 3 colores, emulsión de ají picante, crocante de amaranto con falso caviar de vinagre de rica rica y hojas frescas de suico.
Por su parte, El Alambique, de Alejandra Repetto, es un restaurante que funciona en El Calafate desde 2003 y para la gran final, presentó un bife de guanaco sellado con manteca de Tuétano, puré de coliflor, zanahorias glaseadas y crocante de lomo curado.