En el último tiempo se impuso la moda de lo retro. Esta tendencia pudo verse sobre todo en materia de indumentaria pero también llegó a las barras porteñas. De este modo, los tradicionales aperitivos volvieron a ubicarse como estrellas en las cartas de tragos.
Los bares más importantes de la ciudad los ofrecen y los preparan casi como si fuera un arte. Los aperitivos se insertan dentro de una oferta gastronómica más vasta, en creativos maridajes, aun en remplazo de la carta de vinos.
Una de las iniciativas que colaboraron con el nuevo auge de estas bebidas es el MAPA (Movimiento Aperitivo Argentino), creado en 2013. Martín Auzmendi, embajador de MAPA, explica que existe actualmente una tendencia de derivar aperitivos de la gastronomía, vinculada al resurgimiento del consumo de aperitivos entre las jóvenes generaciones.
“Siempre estuvieron ligados a las comidas, pero sobre todo a un momento especial de disfrute. La Argentina tiene una cultura muy tradicional en este sentido: algunos aperitivos vinieron de Europa y otros se replicaron en el país. En pocos países se consumen tantos aperitivos como en el nuestro. Desde los más tradicionales y con más historia, como el Cinzano, hasta otros que atraviesan el siglo XX como el Campari, el Cynar y el Aperol, que desembarcó en estas tierras hace poco“, explica Auzmendi.
Para Guillermo Blumenkamp, dueño del bar Doppelganger, de San Telmo, “es cierto que hay un retorno a las bebidas de antaño. Hoy la coctelería está viviendo un boom. Hay muchos bares que se dirigen a un público que no quiere tomar cerveza ni vino. Cuando aquí piden un salmón con hierbas, lo acompañan con un cóctel que, a diferencia de la cerveza y el vino, que ponen el cuerpo pesado, te levanta, te sube la libido, te cambia el humor y dura menos en la sangre.”
Así como las mujeres beben más simple y prefieren los tragos frutales y dulces, la que empieza a ser habitué del bar, asegura, descubre los distintos sabores y prueba de todo. En cambio, el hombre es mucho más rutinario para beber. En cuanto al boom de los aperitivos, explica Blumenkamp, “no sólo se vive con el Fernet y regreso del Campari, bajo el nombre de Campari Orange. En mi bar celebramos al final de cada jornada con vermouth. Nuestro trago emblemático se llama ‘el ferrocarril’ y es de los años ’40.”
Fáciles de tomar, los aperitivos abren el apetito. Entre los tragos más vendidos de Doppelganger –de los 102 disponibles en la carta–, está el bourbon, hoy popularizado por la serie de tv Mad Men, que se prepara con whisky americano, azúcar, una rodaja de naranja para perfumar y una cereza.
¿Cuál es tu aperitivo preferido?