Comandado por el chef Dante Liporace, el restaurante Tarquino era considerado uno de los mejores de la ciudad. El año pasado la revista británica Restaurant lo posicionó en el puesto 48° de los mejores lugares para comer en toda Latinoamérica. Desde allí ganó prestigio, se hizo reconocido y obtuvo premios internacionales. Pero esta semana, el restaurante del chef del presidente, Dante Liporace, cerró.
Tarquino estaba ubicado en Rodríguez Peña al 1900, a metros de la lujosa avenida Alvear, en el barrio porteño de Recoleta. El anuncio de cierre fue informado por el propio Liporace en un post en la red social Facebook: «Después de 6 años, cierra Tarquino. Un proyecto que abrí con dos amigos donde compartíamos una idea y concepto hotelero/gastronómico, hubo cambios en la sociedad (por distintos motivos ) y ya los conceptos dejaron de compartirse y mi idea de gastronomía no es compatible con la idea de lo socios actuales. Tarquino fue mi casa, lo amé, mucho, pero al final ya no podía sentir lo mismo y para un chef eso es fundamental. Ya estoy trabajando en mi nuevo proyecto, que será 100 x 100 Dante Liporace».
Tarquino se hizo muy conocido en el mundo de la alta gastronomía su menú “Secuencia de la vaca”, que proponía una degustación de 10 platos de la cabeza al rabo del animal y llegó a ser reseñado en el New York Times. Discípulo de Ferran Adriá, el creativo chef Liporace se convirtió este año además en el responsable de la cocina de la Casa Rosada, donde decide los platos que se sirven en el comedor para los 800 empleados y también el menú que come el presidente y sus funcionarios, además de haber tenido a su cargo comidas para invitados especiales como Barack Obama.