La merienda es una de las comidas más especiales en la dieta argentina. No solo por el placer de degustar unas sabrosas medialunas, sino porque por lo general, es ese momento de descanso post trabajo y antes de que anochezca y tener que ocuparse de la cena.

En Inglaterra se toma el “5’o clock tea”, en varios países sudamericanos se va “de onces”, y en Francia se denomina “goûter” a la colación antes de cenar. Buenos Aires adopta un poco de cada costumbre, convirtiendo a la merienda en un crisol de delicias, con un sinfín de opciones.

Te recomendamos los 5 mejores lugares para ir a merendar:

Franchute

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Se trata de una crepería francesa que se instaló hace muy poquito en el barrio de Villa Crespo, a dos cuadras de Scalabrini y Corrientes.  Aunque sirven almuerzos inolvidables – recomendados: los crepes de salmón-, la hora de la merienda es un desfile de sabores. Pasando por el Croissant De Almendras, la imperdible Tarte Tatín (una tarta invertida con manzana caramelizada), además de las típicas recetas bretonas como la crêpe de manteca y azúcar o la de Nutella y otras especialidades dulces y saladas.

Malabia 310, Villa Crespo, CABA

b-Blue – deli & natural Bar

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Le debe su nombre al arándano (por su nombre en inglés: blueberry) ya que sus dueños son productores y exportadores de esta fruta. Dentro de las opciones de meriendas se puede optar por una opción saludable como granola con yogurt, platos de frutas y muffins de arándanos, entre otras delicias. Además, scones, pain au chocolat, french toasts y mucho más

Para beber tienen hay una gran variedad de jugos naturales que ya son famosos en la zona como el Mandarin Sen que lleva mandarina, mango, jengibre y ginseng; o los saludables jugos verdes.

Armenia 1692, Palermo, CABA

Café Crespin

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Una esquina de Villa Crespo que ya es un clásico. Sirven desayunos y meriendas durante todo el día y algunas opciones muy convenientes que incluyen café y jugo. Entre ellas: yogur con maracuyá y granola casera o las imperdibles french toasts con huevos revueltos y panceta crocante.

Para llevar, cualquier producto de su pastelería, que ostenta aires neoyorquinos. Entre las delicias más destacadas se pueden probar rolls de canela, key lime pie, budín de manzana y jengibre,  leicaj (delicia de la cocina judía a base de miel y nueces).

Vera 699 esq. Acevedo, Villa Crespo, CABA

En el nombre del postre

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Tal como su nombre lo indica, este restaurant se especializa en productos dulces. Tortas en porciones personales, macarones, muffins, budines, cookies y un sinfín de variedades para deleitar y empalagar el paladar.

Para tomar, té helado, frapuccinos y limonadas, además de una extensa carta de cafés y tés.

Soler 5547, Palermo, CABA

Las Violetas

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Un clásico que no precisa presentación. Este bar notable ofrece su tradicional Hora del Te, propia de otra época pero más vigente que nunca.
Las opciones son vastas, pero uno visita este lugar con determinación, y para ellos: María Cala; una merienda para compartir dos (o más) personas que permite probar todo lo que ofrece Las Violetas: mini-tortas, tartas, budines, sándwiches de miga, tostados de jamón y queso, pan, jugo de naranja.

Av. Rivadavia 3899, Almagro, CABA