Un estudio realizado por profesionales de la Universidad de Harvard demostró que el consumo de vino tinto estimula la quema de grasas.
Mediante el seguimiento a 20.000 mujeres, durante 13 años, los resultados mostraron que las mujeres que tomaron dos vasos de vino tinto al día no experimentaron ningún tipo de problema con la obesidad.
El Diario de la Bioquímica Nutricional publicó un estudio en el que se trató de determinar qué es lo que realmente hacen las uvas en el cuerpo y cómo se vino tinto estimular la pérdida de peso.
El experimento implicó a ratones de laboratorio y demostró que los ratones eran menos propensos a almacenar grasa en el hígado cuando se les dio extracto de uva de vino tinto. El mismo grupo de ratones también mostraron una disminución de los niveles de azúcar en sangre. Sorprendentemente, los ácidos de la uva tienen la capacidad de retrasar el crecimiento de las células grasas.
Pero como si esto fuera poco, el vino tinto además es un potente antioxidante y por su capacidad para prevenir el daño celular, protege la salud del corazón y previene la Enfermedad de Alzheimer, debido a su capacidad para prevenir el daño celular.
Sin embargo, la clave parece estar en la moderación, ya que dos copas están bien, mas una botella entera sería perjudicial.