El restaurant del Circulo Italiano presenta su menú de otoño con todos los matices y una Carta Itálica, fiel a su tradición.
El restaurante del Circolo Massimo, ubicado en la elegante mansión de la familia Leloir, presentó su carta de otoño. Fiel a sus raíces, los platos tienen una impronta bien italiana, y en esta ocasión predominan los dorados y sabores crujientes.
La cocina propone un recorrido sensorial guiado por las tentaciones de cada región: Formaggio brie croccante, funghi trifolati, cipolle caramellate e tartufo (Queso brie crocante y frito sobre hongos salteados, cebollas caramelizada y aceite de trufas), o una Degustazione de embutidos para empezar, con Sorpresatta, longaniza calabresa, salame Milán, prosciutto y mortadela con pistacho.
Pero para qué negarlo, las pastas son un plato clave, esenciales en la cocina italiana, por eso, se destacan los originales Ravioli di agnello en massa di funghi con salsa di birra nera (Ravioles de cordero en masa de hongos con salsa de cerveza negra, miel y menta). Como plato fuerte, Medaglione di manzo in salsa Malamado, purè di ceci e spinaci alla italiano (Lomo en salsa al Malamado, puré suave de garbanzo y espinaca cocida a la italiana) y Cernia in crosta di frutta secca, risotto di grano e finocchio grigliato (Mero a la plancha en costra de frutos secos,risotto de trigo e hinojos grillado).
El postre de este otoño será inolvidable: Pere al Chardonnay, con gelato di zabaione, salsa di vaniglia e mandorle tostata (Peras al Chardonnay con helado de sabayón, salsa de vainilla y almendras tostadas).
Declarada de Interés Histórico y Cultural por la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires, la mansión proyectada por el arquitecto noruego Alejandro Christophersen en 1903 es un lugar único dentro de la ciudad de Buenos Aires para pasar una típica velada italiana, disfrutando de su música y platos típicos, en sus elegantes salones con vista al jardñín o su terraza.
