Hidratarse siempre es fundamental y con la llegada de la primavera, más aún. Para darle un twist a tus bebidas de siempre, compartimos algunas ideas saludables y deliciosas.

Las gaseosas, ya sea las comunes que contienen azúcar o las dietéticas que tienen edulcorantes, tienen propiedades adictivas como la cafeína y otros aditivos que le dan color. Estos componentes producen ganas de seguir consumiéndolas.

Cambiar las gaseosas por el agua con gas o soda es muy saludable porque el agua con gas, gracias a sus burbujas, da saciedad, y al ser agua es mucho más beneficioso que otras bebidas”, asegura la Licenciada Liliana Grimberg (MN: 978), Nutricionista, Dietista y Coordinadora del área de Nutrición del Centro Ravenna.

Los jugos y licuados con frutas de estación son una gran alternativa, incluso si se hacen con agua gasificada. Para disfrutar en esta primavera, SodaStream, la máquina de soda casera en casa comparte 7 propuestas repletas de sabor y aptas para distintos momentos del día.

Kale y mandarina

Dentro del circuito gastronómico, desde hace algunos años su nombre comenzó a asomar con fuerza. Hablamos del kale, una variedad de col originaria de la región norte de Alemania, rica en vitamina C, A, calcio, fibra y betacaroteno. Una idea simple para consumir este vegetal es picar un puñado de hojas y licuarlas con gajos de mandarina y una medida generosa de soda. Ideal para arrancar la mañana.

Arándanos y banana

Esta exquisita combinación se puede potenciar aun más gracias a las burbujas del agua con gas. La elaboración no es fácil, es facilísima, y consiste en licuar rodajas de una banana, un puñado de arándanos y aproximadamente 250 cc de soda. Con hielo, es infalible para combatir el calor en las tardes de primavera y verano y además es antioxidante y aporta magnesio, potasio y ácido fólico.

Frutilla y limón

Este “daikiri” sin alcohol es rico y liviano y no solo se puede tomar en el desayuno, sino que es práctico para llevar al trabajo en una botella e hidratarse a lo largo de la jornada. Para un vaso largo se necesitan de 100 a 150 gramos de frutillas en gajos, jugo de limón a gusto y 150 cc de agua con gas. Se puede agregar miel o stevia para endulzar.

Limonada frozen

Aparte de la vitamina C, el limón posee vitaminas del grupo B y vitamina E, potasio, magnesio, calcio y fósforo, cobre, zinc, hierro y manganeso, un verdadero combo nutritivo que ayuda a reforzar el sistema inmunológico. Una manera eficaz de incorporarlo es mediante la preparación de limonada casera. Para una jarra se necesita jugo de tres limones y dos limas, 500 cc de agua con gas o mitad y mitad, 100 gr de azúcar y la ralladura de 2 limones, más 5 cubitos de hielo. El secreto es hacer primero una mezcla de agua y azúcar hasta formar un jarabe y luego integrar el resto de los ingredientes. Esta receta es muy versátil y se puede consumir como bebida para el almuerzo o la cena.

Iced Tea

El Iced Tea o té helado se popularizó a inicios del siglo XIX durante la Exposición Mundial de St. Louis. Su éxito creció y hoy incluso se consiguen versiones envasadas de fabricación industrial. Básicamente, consiste en dejar enfriar un té del blend de preferencia y se le pueden añadir trozos de fruta de temporada, hielo y azúcar. El toque diferente es sumar un chorrito de agua con gas para darle un efecto efervescente.

Milkshake casero

Este elixir primaveral se prepara con medio litro de leche fría, un chorrito de soda, un cuarto de helado de chocolate, trocitos de frutilla y 2 cucharaditas de cacao en polvo. Todo, a la licuadora. Opcionalmente, se puede incluir un topping de crema batida, ralladura o trozos de chocolate, almendras picadas o nueces. El agua con gas potencia el sabor y la textura de ese potre-bebida también conocido como “Sueño de una noche de verano”.

Sobremesa de adultos: Gin Fizz

A esta selección de bebidas de primavera le faltaba un permitido con alcohol para terminar el día o bien para cortar la tarde con un cóctel bien refrescante. El Gin Tonic, clásico de los clásicos, puede convertirse en Gin Fizz. Lleva dos onzas de gin, jugo de medio limón y una pizca de azúcar, todo bien revuelto e integrado y, para finalizar, agua con gas y hielo hasta completar el vaso.