Un corazón, una espiga, un tulipán y más… el Art Latte llegó para quedarse. Y detrás de todo café “pintado”, se esconde un gran barista. Por lo general, crean sus obras de arte en las cafeterías de especialidad y son los artistas de una tendencia que cada vez es más aclamada

Este sábado 15 de abril se celebra en Argentina y en el mundo el Día Mundial del Arte en conmemoración al indiscutido Leonardo Da Vinci, que supo aportar a la historia su pintura, su ingenio, su arquitectura, su poesía y filosofía. Su arte, emulando un ambicioso resumen de su legado. 

A través de la historia, la evolución sociocultural hizo que el arte despegara desde sus bases para transformarse, corromperse y (re) convertirse a sí mismo. De esta manera y con las bases de lo tradicional, las herramientas mutaron para acaparar nuevas áreas y adaptarlas hacia un nuevo rumbo, una nueva demanda. Así es como surgieron nuevos estilos de pintura, música, escritura, danzas, y un sinfín de caminos y asociaciones.

Art Latte: arte y café en una misma taza

Pero hay determinadas disciplinas que, impulsadas por el arte, logran fusionar dos pasiones o vertientes para crear una nueva tendencia. Es el caso del Art Latte, la fusión del arte y el café, dos eslabones que lejos de andar sueltos, se entrelazan para impulsarse a sí mismos. Y si de pasionales y artistas hablamos, en Argentina esta movida ya tomó terreno y junto con las cafeterías de especialidad, enamoraron a cientos de personas que van en busca del café perfecto. 

El café es la segunda bebida más consumida en todo el mundo, sólo es derrocada por el agua. En Argentina, se consume 1 kilo anual per cápita y en los últimos tres años el consumo de la infusión creció un 2,2%, según un estudio elaborado por The Brand Bean para la Cámara Argentina de Café. Es que cada vez son más las alternativas para consumirlo: latte, flat white, frío, con salsa, infusionado como el Cold Brew y más. Y detrás de esta magia está el propio barista: aquél mago que encandila a sus comensales con bebidas que potencian los atributos de cada grano. 

Y entre todas las aperturas que se ofrecen para los amantes de esta infusión, están los aclamados Cafés de especialidad y en sí mismos los artistas del café, o el ya mencionado Art Latte. El hecho de que sobre la superficie de la taza se retrate una figura, se convirtió en un tendencia que los consumidores fueron a buscar. El secreto es lograr una densidad en la leche similar a la de la crema. 

Las ténicas

Hay dos tipos de técnicas: el vertido libre y el etching. El primero consiste en tomar la jarra con la leche vaporizada y verterla sobre el expresso. Mientras cae la leche y con una serie de movimientos entre la taza y la muñeca, se va formando el dibujo deseado. Para esta técnica, se requiere una buena maniobra y movilidad de las manos y paciencia para aprender, por sobre todo.

Por otro lado, está el etching que por el contrario de la técnica de caída libre, acá se precisa más las habilidades de dibujante. En este caso, se “graba” directamente sobre el café con diferentes herramientas. Es fundamental la espuma de la leche, una buena cantidad y una condensación muy firme. Con una cuchara o espátula, los baristas que utilizan esta técnica dibujan rostros, personajes famosos o animales con relieve. Con ayuda de pinceles y tinturas vegetales, le agregan los detalles como ojos, boca, pelo, ropa, entre otros. 

Quienes utilizan esta última técnica, también innovaron con el Art Latte 3D donde realizan dibujos tridimensionales que sobresalen del café y dejan una presentación sumamente novedosa e instagrameable. 

Otras obras de arte hechas con café

Pero el café es mucho más que lo que consumimos a diario. Hoy en día, se trabajan en muchas propuestas que nos sacan de la taza convencional y hogareña y nos traen nuevas ocasiones de consumo. No sólo para apreciar su sabor, sino también para romper estructuras y estacionalidades y explorar más allá el amor por el grano. 

Así como vimos la tendencia del Art Latte, hay nuevas formas de beber café, por ejemplo, los fríos. Hay muchos nombres que, aunque suenen parecidos, cada uno lleva un paso a paso diferente. El Frapuccino es café con hielo, leche, crema batida y salsas, como chocolate, dulce de leche o caramelo, las más usuales; Luego llega el Iced Coffee, que es un shot de café caliente con hielo, y por último, el más vistoso y aclamado, el Cold Brew, que es la maceración del café en agua fría durante 12 o 24 horas.

Pero para quienes desean llevar su creatividad a otro nivel, también está en auge la tendencia de cocktails con café. La combinación de café y alcohol está tradicionalmente vinculada a los licores premium. Pero también existe un mundo que juega, interviene y por sobre todo crea diferentes sabores para lograr tragos ideales para beber café en verano y en cualquier estación del año. En este caso, Tía María propone el Tia Espresso Martini, un trago en copa de cóctel lleno de hielo a base de 1 parte de Tía María, 1 y 1/2 parte de vodka y 1 parte de café expreso, decorado con granos de café en su superficie.

Con dibujos, en un cocktail, frío o caliente. El café forma parte de nuestro día a día y tiene en su esencia aquél tostón perfecto que nos enaltece la creatividad.