De la mano de la autora Graciela Martinez, el libro «Poytáva» repasa el origen y evolución de la cocina paraguaya. Escrito en español y guaraní, el libro es el resultado de más de 30 años de investigación.

«Poytáva» significa alimento en idioma guaraní y es la palabra elegida para titular la voluminosa obra en la que Graciela Martinez recopilo decenas de recetas autóctonas como por ejemplo el Vori Vori Negro, una sopa hecha a base de harina de maíz, o la mandioca hervida, que reemplaza el pan en muchas comidas.

El libro, que responde también al título de «Origen y Evolución de la Cocina Paraguaya», es el resultado de una investigación de 30 años por la geografía del país por parte de su autora. Editado en español y en guaraní, en el libro se detallan también los hábitos alimenticios de los paraguayos, en sus diferentes etnias, antes de la llegada de los españoles, así como sus técnicas de cocción.

Cocina típica, autóctona y mestiza

En ese sentido, Martínez diferencia entre la comida típica, la autóctona y la mestiza, aunque a veces esos conceptos se superponen. Como ejemplo de esto, la autora cita el batiburrillo, un guiso a base de menudencias de carne de cerdo y de vaca, que es tanto una comida española como típica del departamento paraguayo de Misiones.

En el libro se cuenta, entre otras historias, la de la sopa paraguaya, que pese a su denominación es un bizcocho salado con un cuerpo elaborado con harina de maíz, queso y cebolla. Según consigna la autora, ese bizcocho nació de la nostalgia de los misioneros por el ensopado español, el pan mojado en leche que se hornea con un poco de queso. Ante la inexistencia del trigo, los misioneros buscaron hacer algo similar con un pan hecho a partir de la harina de maíz, que marcó el nacimiento del ensopado paraguayo, que redujo su nombre a sopa.